En el Olimpo habitan los dioses guerreros y pendencieros, siempre a la greña unos contra otros, buscando la forma de hacer daño sin que los demás se enteren. Zeus baja a la Tierra adoptando la forma de toro y busca doncellas que no le hagan ascos. La guerra de Troya está en su momento culminante y Odiseo viaja por mares ignotos. Antes o después los dioses arrasarán sus dominios terrestres y convertirán el Olimpo en un yermo campo radioactivo.
Sin embargo aún existen almas sensibles entre los dioses del Olimpo, dioses menores que hasta ahora han disfrutado de la Ambrosía y de los encantos de Venus, sin cuidarse ni mucho de poco de los conflictos divinos y de los humanos. En una reunión secreta el dios Rásec (**)convoca a la rebelión y pronto se toman decisiones:
-Crear un nuevo Olimpo, ésta vez dedicado a las letras y a las artes, donde las almas sensibles de los dioses menores se dediquen a la belleza y no a la destrucción. Tendrán que buscar algún monte lejano e invisible no ocupado en algún lugar del firmamento, cercano o lejano y allí establecerán su paraíso.
-Lo llamarán Parnaso y en él crearán las historias más maravillosas, los cuadros más bellos, las músicas más conmovedoras...Entre copa y copa de ambrosía disfrutarán de los placeres reservados a los amantes de la belleza, tocarán la lira y deslizarán el cálamo por el pergamino.
-Ascenderán al Parnaso a los humanos más sensibles y creativos y les convertirán en semidioses.
-La magia se apoderará de sus existencias y los objetos inanimados volverán a la vida que tuvieron en el caos primigenio. Las máquinas de escribir hablarán con los folios en blanco y las hojas vírgenes dejaran de serlo a manos de jóvenes cálamos con tinta abundante en artísticos tinteros. Y los inventos modernos tendrán su lugar entre tanta magia, los bolígrafos y las plumas estilográficas danzarán sobre suelos pulcros y los portátiles escupirán sus parrafadas a través de las cándidas impresoras.
Dicho y hecho. Los dioses más sensibles del Olimpo viajan al Parnaso y allí se instalan, sonrientes y alegres. El dios Rásec propone que los primeros humanos sean ascendidos y el alado Mercurio descubre a dos buenos candidatos que son propuestos en lista cerrada a la asamblea de los dioses.
-Se propone a Mr. Bernie, escritor humano, como nuevo semidios en el Parnaso. Se adjunta currículum.
-Se propone al humano que se hace llamar Gregotd como candidato al Parnaso. Se adjunta currículum.
-Necesitamos un poeta que toque la lira. Se propone a ...
Continuará.
** Nota para los lectores que no lo hayan descubierto: Rásec leído al revés es César. Muchos de los dioses del Parnaso, especialmente los humanos elevados, tendrán nombres semejantes, que leídos al revés recordarán su vieja naturaleza humana.
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